jueves, 4 de marzo de 2010

ME ODIO


Me odio, por hacer de mi una miserable deseando tus besos. Me odio porque cada vez que me siento alegre mi mente provoca una imagen tuya en otra compañía. Me odio porque en mi soledad pienso en ti. Me odio por que cuando me duermo desearía despertar a tu lado. Me odio por que cuando despierto veo la cruda realidad y compruebo tu rostro no está junto al mío. Me odio por que cuando te veo o escucho, mi corazón se acelera. Me odio por mi falta de carácter al no reprochar tu proceder. Me odio porque consiento me llames con otro nombre que no es el mío. Me odio porque eres la persona que desearía ver caminando siempre a mi lado. Me odio porque mi cuerpo no soporta tenerte lejos y lo que es peor aún, por todas las cosas anteriores...
SÉ, ¡¡TE NECESITO!!

1 comentario:

Elvis dijo...

Nunca te odies por sentir...es lo mínimo que podemos hacer en nuestra vida.
El hecho de no ser correspondidos es una mera circunstancia ajena a nuestra voluntad, pero que nunca debe coartar nuestro sentir.
Lo único que podemos hacer en estos casos, es esperar a que madure y se caiga por su propio peso dejándonos libres. Luchar contra ello nos agotará y nos impedirá disfrutar de otras cosas que se nos ofrecen.

Saludos.

 
ir arriba