Estrellas que el cielo adornáis a la par que mis palabras o deseos no pronunciados escucháis. A todas sin excepción pero muy especialmente a vosotras. ESTRELLAS FUGACES, de quien dicen si se tiene la suerte de veros y se os pide un deseo este a bien tenéis conceder. Una vez más recurro a vuestra generosidad con la esperanza de ver cumplida esta petición no interesada:
Que esa nueva vida que mi hija tiene en su vientre, llegue pleno de salud, y su madre salga ilesa del maravilloso acontecimiento de traer un nuevo ser al mundo. Mi petición no se debe a otra causa que el complicado estado de gestación que está teniendo y que vosotras a quien tantas y tantas veces os he hablado por inquietudes del "alma" sabéis ahora de mi preocupación.
Gracias por estar ahí haciendo nuestras noches sean más livianas, pues el sólo hecho de contemplaros nos infunde sosiego, nos hace soñar y como en esta ocasión, os hacemos peticiones casi en forma de oración, porque soñar es gratis, nos mantiene esperanzados y la esperanza es el mayor aliciente para seguir hacia adelante pese a cuantos obstáculos nos ha deparado, depara y deparará nuestra empedrada existencia.
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